Ya tienes casi dos meses... y mirate lo grande que estás. Debo decirte que me molesta esta maldita tripita que me está saliendo, pero no puedo dejar de acariciarte mientras la miro al espejo. Algunos dicen que tengo un brillo especial en la mirada, otros, que parece que no he parado de llorar en meses... y es cierto, no paro de llorar. Lloro por tí, y por mí, porque no se que hacer con nosotros. Si otras fueran las circunstancias y el momento, haz cuenta de que ni siquiera me plantearía otra alternativa que la de verte crecer día tras día en mis entrañas. Pero ahora ¿qué solución es la adecuada? No hablo de la fácil o de la correcta, puesto que de ambas se la respuesta, hablo de la adecuada a mi edad y a la tuya. A mi vida y a la suya, a la que hemos convertido en la nuestra...
Tranquilo mi vida, que ahora, en el momento presente sigues estando a salvo. Ahora he descubierto que tu has descubierto los frutos secos, y que, al igual que a mis pulmones, el tabaco no te gusta. Cuando pongo carnavales noto que el corazón se te alegra, debe de ser porque también te sientes de la tierra que pisas.
Mi niño, mi vida, mi corazón, descansa tranquilo y escucha los pasodobles que te canto para que te duermas...
martes, 9 de junio de 2009
lunes, 1 de junio de 2009
Pensamientos del lunes por la noche (Vol. ?)
Es lunes, y ya no sé que es lo que siento. Mentiría si dijera que no he pensado en tí ni un solo momento... pero eso sería mentir... y ya sabes que yo no se mentir. A veces me pregunto la imagen que daremos desde fuera... yo desde dentro te veo como un angel que ha llegado desde el infierno para cuidarme... y me preguntas si te doy miedo... y es verdad; no es que me des miedo... es que me das pánico. No se ni de la historia la mitad... pero eso ya me da igual. Cuando me abrazas por las noches, cuando me tapas con la manta, cuando me coges en brazos y me dices que todo pasará pronto y después me susurras un "sabes que te quiero mucho" no puedo evitar decirme ¡qué demonios! mi alma ya está condenada, qué mas da que me condenes tu también. Y tienes paciencia, y me explicas las cosas como la niña que para ti soy. Tu dices que eres un viejo... pero cuando duermes yo creo que no es asi... tu eres mi niño, al cual yo también voy a cuidar, porque esto del amor dicen que es cosa de dos... y yo no lo he comprendido hasta ahora ¡mira si seré idiota!
Y aunque se, que al igual que los dulces de chocolate (uno de mis favoritos) tiene fecha de caducidad natural, no puedo evitar sentirme afortunada por tener a alguien como tu estrechándome entre sus brazos...
Y ya ves, que junto con el perro vos y yo hacemos linda estampa!
Y aunque se, que al igual que los dulces de chocolate (uno de mis favoritos) tiene fecha de caducidad natural, no puedo evitar sentirme afortunada por tener a alguien como tu estrechándome entre sus brazos...
Y ya ves, que junto con el perro vos y yo hacemos linda estampa!
viernes, 22 de mayo de 2009
No me importa...
No me importa que hiciste o a donde fuiste. No me importa nada. No me importa si hiciste daño, si te persiguió la policía o si tienes cuentas pendientes con la mafia. No me importa si estuviste a punto de casarte, si tienes la casa, el coche y el local para montar tu vida lejos de aquí. No me importa quién te besó antes que yo, no me importaa quien engañaste o qué cosas ilegales pasaron por tus manos.
Mira bien lo que te digo que todo eso me da igual. Porque tu estás aquí y ahora, y estás conmigo. Y dices que me quieres y yo he decidido creerte.
Por eso me da igual todo el maldito pasado. Porque el mio ha desaparecido en el momento que llegaste tu.
Mira bien lo que te digo que todo eso me da igual. Porque tu estás aquí y ahora, y estás conmigo. Y dices que me quieres y yo he decidido creerte.
Por eso me da igual todo el maldito pasado. Porque el mio ha desaparecido en el momento que llegaste tu.
martes, 19 de mayo de 2009
En mis entrañas...
Me miro al espejo y te acaricio, aunque todavía no sepas de tu existencia. Te hablo y te susurro pequeñas palabras de cariño aunque todavía no sepa si existirás o no. Me pongo los pantalones más bajos que de costumbre, no vaya a ser que te ahogues como me ahogo en ocasiones yo.
Y me imagino que cara pondrías si supieras que no me pareces un problema más que una solución. Quizás seas el angel que va a venir a cuidarme, a salvarme del abismo de mi soledad. Y te cantaré nanas, de esas en las que el malo siempre huye para dejar espacio a la felicidad...
Duerme mi niño... duerme conmigo...
Y me imagino que cara pondrías si supieras que no me pareces un problema más que una solución. Quizás seas el angel que va a venir a cuidarme, a salvarme del abismo de mi soledad. Y te cantaré nanas, de esas en las que el malo siempre huye para dejar espacio a la felicidad...
Duerme mi niño... duerme conmigo...
lunes, 11 de mayo de 2009
Querido enemigo...*
Ahora me alegro de que me dejaras. Si no me hubieras dejado jamás habria aceptado el trabajo. Si no hubiera aceptado el trabajo probablemente seguiría llorándote. Si no me hubiera ido, jamas lo habría conocido a el.
El es el enemigo con todas las letras. Y en ocasiones me da miedo, porque se que no lo puedo controlar. Es el mismo, y me cuida. Me abraza. Y me dice que no lo deje solo.
Y yo como una gilipollas lo abrazo, le digo que no es un desastre y después lo beso. El me abraza me llama rubia y después me besa.
Lo importante de los fines de semana ya no es que tenga que ir a trabajar. Lo grave de los fines de semana es que me encanta dormir con el enemigo... Y a veces me da la sensación de que no guarda un punzón bajo la almohada...*
El es el enemigo con todas las letras. Y en ocasiones me da miedo, porque se que no lo puedo controlar. Es el mismo, y me cuida. Me abraza. Y me dice que no lo deje solo.
Y yo como una gilipollas lo abrazo, le digo que no es un desastre y después lo beso. El me abraza me llama rubia y después me besa.
Lo importante de los fines de semana ya no es que tenga que ir a trabajar. Lo grave de los fines de semana es que me encanta dormir con el enemigo... Y a veces me da la sensación de que no guarda un punzón bajo la almohada...*
domingo, 19 de abril de 2009
Madrugadas de fin de semana...*
Estoy borracha. Me he bebido la mitad de una botella de vino. Y mi cama está sola, no habrá nadie abrazándome cuando apague las luces. En la mesa del salón... bueno, eso es un desastre; un paquete de kikos a la mitad, una botella casi vacía, un vaso al que le estoy dándo el último trago y apuntes de italiano desperdigados por el cristal.
Resumiendo, diré lo siguiente; el chico al que quería está con otra, el chico con el que jugaba lo he mandado a tomar por saco y ahora resulta que duermo con el enemigo.
Mi vida es un caos y lo desconcertante es que me estoy empezándo a acostumbrar. No voy a dar pena, nadie sabe lo que me pasa por la cabeza. Pero en algún sitio tenía que dejar constancia de que es domingo, estoy borracha y hecho de menos al enemigo. Me estoy enamorándo de él. Y lo triste es que me cuenta mentiras que me quiero creer verdades... como la de ayer por la noche; que el tio que me dejó escapar fue gilipollas porque yo era guapa e inteligente, y que no lo decía porque le cayera bien, sino porque era lo que tenía delante. Después me quede dormida en sus brazos y ni siquiera intentó besarme o meterme mano. Maldito cabrón, me tuve que ir de su lado porque la iba a chafar.
Como la gilipollas que soy, metiéndome donde no me llaman y bebiendo para olvidar.
Resumiendo, diré lo siguiente; el chico al que quería está con otra, el chico con el que jugaba lo he mandado a tomar por saco y ahora resulta que duermo con el enemigo.
Mi vida es un caos y lo desconcertante es que me estoy empezándo a acostumbrar. No voy a dar pena, nadie sabe lo que me pasa por la cabeza. Pero en algún sitio tenía que dejar constancia de que es domingo, estoy borracha y hecho de menos al enemigo. Me estoy enamorándo de él. Y lo triste es que me cuenta mentiras que me quiero creer verdades... como la de ayer por la noche; que el tio que me dejó escapar fue gilipollas porque yo era guapa e inteligente, y que no lo decía porque le cayera bien, sino porque era lo que tenía delante. Después me quede dormida en sus brazos y ni siquiera intentó besarme o meterme mano. Maldito cabrón, me tuve que ir de su lado porque la iba a chafar.
Como la gilipollas que soy, metiéndome donde no me llaman y bebiendo para olvidar.
viernes, 17 de abril de 2009
Gritos ahogados sin palabras coherentes*
Mírate al espejo querida, ¿qué es lo que ves? No te reconoces en este estado, y la imagen que tienes delante de ti no ayuda. Necesitas depilarte las cejas, y el corrector de ojeras es bastante útil. Mírate, ¿no te das cuenta de que estás dejando de pensar otra vez? vuelves a dejarte llevar, a ser títere de nadie que vaga borracha por la ciudad. Has vuelto a beber, y has vuelto a drogarte. Te levantas porque es lo que tienes que hacer, y ya ni siquiera te hace ilusión remolonear en la cama. Solo piensas en la hora de la copa, cuando todo se marcha, cuando te quedas sola... que no en soledad, sola sin tus obligaciones, sin tus esperanzas. Sola contigo, el alcohol y el amor de una noche como única compañía.
Al menos has dejado de fumar, por lo que poco a poco va entrando aire en tus pulmones. Has perdido la fe en el amor. La amistad se te torna algo demasiado complejo de entender a medida que los llamados amigos van desapareciendo ahora que los necesitas tanto. La familia es otra historia, sientes que ya no te comprenden, quieres huir, saltar, desaparecer.
Y solo esperas las siete de la tarde, sabiendo que durante tres días solo habrá trabajo, alcohol y olvido. Las palabras superfluas de una noche. La vida que se te marcha para siempre y a la que ya no tienes fuerzas para decirle adiós.
He vuelto al punto en el que decidí huir. Querido extranjero... quizás necesite volver a tí de nuevo.
Y la esperanza naufragó de nuevo, a la deriva, sin una maldita tabla para salvarse
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