Todavia no me creo que te hayas ido. Miro el movil, y espero con las mismas ansias el momento de tu llamada. No, no me lo creo. Todavía me resisto a creer que todo esto haya pasado, y solo espero el momento de despertar de esta maldita pesadilla que con el paso de los días se me está transformando en una escalofriante realidad… tu ausencia.
No, todavía me resisto a creerlo, a aceptarlo. Aceptar que esto haya llegado al fin, que nunca más volveré a sentirte a mi lado, a saber que vendrás a buscarme a la hora de la quedada, al momento en el que nos fundiremos en un abrazo y sabremos que el mundo no existe para nosotros dos, que solos tu y yo vivimos en una burbuja en la que nadie puede entrar, ese aura llena de protección, amor y cariño que va mas allá de la comprensión de todos aquellos que no creen en el amor.
No, dime que no es el fin. Dime que podremos encontrar una solución, dime, por favor que todo esto no se ha acabado. Dame un recoveco de esperanza ilusoria en el que poder cobijarme hasta el momento de tu regreso. El momento en el que todo volverá a ser como siempre, tu y yo y nosotros como única realidad verdadera y válida… nosotros, solos, tu y yo.
Tu eres mi vida, mi cielo, mi razón de seguir adelante. Contigo se que todo puede ser posible, que si lo podré lograr. Tu eres el motivo por el que he vuelto a creer y a sonreir como una niña, la razón por la que he vuelto a recuperar las ganas de superarme una y otra vez. Tu eres todo, tu eres mi todo.
Prométeme que volveremos a estar juntos, así pasen tres, cinco o diez años. Que volveremos a estar juntos, pase lo que pase, que esto no es un adiós definitivo, solo una pausa, un momento para los anuncios, para la publicidad, para volver a coger la historia con más emoción si es que eso es posible. Ç
Niño, tu eres mi vida, y no sabes como me está comiendo la desesperación por dentro. No duermo, apenas como, solo le doy vueltas y vueltas a la cabeza acerca de cómo podrìa conseguir que volvieras, y mandar a todo el mundo que te ha hecho sufrir a la mierda, para darles en las narices con sus puñeteros discursos de burocrácia inexistente, ciega y estúpida.
¿sabes algo? Yo te esperaré siempre, porque eres el único hombre del que me he enamorado y del que me enamoraré, y todavía quiero creer que podrás volver. Me dicen que lo único que puedo hacer es casarme… pero ahora no puedo hacerlo, no puedo. No es un plan factible, no se puede sustentar en los malditos preceptos legales que exigen un patrimonio común y un historial de nosequé mierda para que podamos certificar que esto es algo más que un maldito papel de mierda. Pero ¿sabes otra cosa? Que si que me casaría contigo, no para arreglar esto, sino porque te quiero, y te quiero tener todos y cada uno de los dias de mi vida a mi lado. Quiero ver como el tiempo pasa por nuestros ojos. Y si no hay matrimonio, pues que no lo haya. Yo solo quiero pasar el resto de mi vida contigo… uno tras otro y tras otro…
Así, que te propongo algo, cuando pueda sustentarme por mi misma, cuando pueda certificar todo aquello que me piden para un maldito matrimonio o lo que sea, aceptame en matrimonio, porque te quiero, así pasen tres, cinco, o diez años. Casate conmigo dentro de tres años. Vente a vivir conmigo dentro de tres años. Haz tu vida conmigo para siempre dentro de tres años. Se mio para siempre y acéptame tuya para siempre dentro de tres años… quiereme para siempre dentro de tres años…
Yo te querré siempre mi vida, mucho más de tres años… así pasen treinta años.
sábado, 10 de octubre de 2009
miércoles, 8 de julio de 2009
Adios.
Me has mentido. Y yo te he creido... o he creido creerte, según se mire. Y sigues mintiendo. Ya sabía que eras el enemigo, pero nunca imaginé hasta que punto lo serias. Y mirame, que idiota soy, y más aún que he sido. No me creo nada. Ya no. Se me han olvidado nuestras noches, nuestras tardes hablando, nuestros cafés y tus "buenos días mi vida". Se acabó, ya no te creo.
Un día me dijiste que no matara lo que sentías por mi... bien, ahora te veo como un aprovechado que creyó encontrar en la pequeña niña de ojos azules que no soy a la idiota que se enamoraría y creería cada palabra que salia de tu boca. Lo siento, te equivocaste de cría. No es que yo haya matado nada... no se puede asesinar aquello que nunca nació. Y puede que si sientas cariño... pero lo has enterrado mentira sobre mentira... ya ni siquiera pienso que tu nombre sea verdad.
Y te voy a decir adiós aunque me duela la vida... ya solo siento rabia, rabia y dolor. Espero que haya alguien que te crea cariño... porque obviamente, las historias (mas todavía) de anoche, siguen sin encajar en el incompleto puzzle que has creado de tu vida.
Y gracias al cielo doy de no tener nada tuyo dentro de mi. Si, supongo que fuiste el polvo del siglo... pero bueno, todavía me queda por buscar el del milenio.
Mierda de Atlántico y de playa... al carajo.
Un día me dijiste que no matara lo que sentías por mi... bien, ahora te veo como un aprovechado que creyó encontrar en la pequeña niña de ojos azules que no soy a la idiota que se enamoraría y creería cada palabra que salia de tu boca. Lo siento, te equivocaste de cría. No es que yo haya matado nada... no se puede asesinar aquello que nunca nació. Y puede que si sientas cariño... pero lo has enterrado mentira sobre mentira... ya ni siquiera pienso que tu nombre sea verdad.
Y te voy a decir adiós aunque me duela la vida... ya solo siento rabia, rabia y dolor. Espero que haya alguien que te crea cariño... porque obviamente, las historias (mas todavía) de anoche, siguen sin encajar en el incompleto puzzle que has creado de tu vida.
Y gracias al cielo doy de no tener nada tuyo dentro de mi. Si, supongo que fuiste el polvo del siglo... pero bueno, todavía me queda por buscar el del milenio.
Mierda de Atlántico y de playa... al carajo.
lunes, 15 de junio de 2009
Ahora...
Mi niño, no te entristezcas ni te preocupes por mi. Son cosas de mayores las que pasan ahora, pero tu debes de estar tranquilo, porque saldremos de esta, te lo prometo. Mirate lo grande que estás, no paro de preguntarme cómo te sentirás en ese pequeño lugar en el que estás despertando a la llamada vida. Yo nunca te dejaré solo, antes moriría. Nunca te haré sentirte mal mi vida, porque tu no tienes la culpa de nada de lo que me pase a mi. Tu eres mi decisión y mi responsabilidad, al tiempo que lo que mas quiero en este mundo en este momento.
Ayer decidí marcharme de casa. Nunca volverá a ser nada como antes. Pero saldremos adelante mi vida, te lo prometo. Mientras escucha aquello de carnecita de gallina y recuerda que antes de que la luna se meta en tu cama ya me habré metido yo para cantarte las nanas que me invento.
Tranquilo mi vida, mi alma, mi corazón... que la madre fortuna volverá a sonreirnos a los tres.
Ayer decidí marcharme de casa. Nunca volverá a ser nada como antes. Pero saldremos adelante mi vida, te lo prometo. Mientras escucha aquello de carnecita de gallina y recuerda que antes de que la luna se meta en tu cama ya me habré metido yo para cantarte las nanas que me invento.
Tranquilo mi vida, mi alma, mi corazón... que la madre fortuna volverá a sonreirnos a los tres.
martes, 9 de junio de 2009
De nuevo hablan mis entrañas...
Ya tienes casi dos meses... y mirate lo grande que estás. Debo decirte que me molesta esta maldita tripita que me está saliendo, pero no puedo dejar de acariciarte mientras la miro al espejo. Algunos dicen que tengo un brillo especial en la mirada, otros, que parece que no he parado de llorar en meses... y es cierto, no paro de llorar. Lloro por tí, y por mí, porque no se que hacer con nosotros. Si otras fueran las circunstancias y el momento, haz cuenta de que ni siquiera me plantearía otra alternativa que la de verte crecer día tras día en mis entrañas. Pero ahora ¿qué solución es la adecuada? No hablo de la fácil o de la correcta, puesto que de ambas se la respuesta, hablo de la adecuada a mi edad y a la tuya. A mi vida y a la suya, a la que hemos convertido en la nuestra...
Tranquilo mi vida, que ahora, en el momento presente sigues estando a salvo. Ahora he descubierto que tu has descubierto los frutos secos, y que, al igual que a mis pulmones, el tabaco no te gusta. Cuando pongo carnavales noto que el corazón se te alegra, debe de ser porque también te sientes de la tierra que pisas.
Mi niño, mi vida, mi corazón, descansa tranquilo y escucha los pasodobles que te canto para que te duermas...
Tranquilo mi vida, que ahora, en el momento presente sigues estando a salvo. Ahora he descubierto que tu has descubierto los frutos secos, y que, al igual que a mis pulmones, el tabaco no te gusta. Cuando pongo carnavales noto que el corazón se te alegra, debe de ser porque también te sientes de la tierra que pisas.
Mi niño, mi vida, mi corazón, descansa tranquilo y escucha los pasodobles que te canto para que te duermas...
lunes, 1 de junio de 2009
Pensamientos del lunes por la noche (Vol. ?)
Es lunes, y ya no sé que es lo que siento. Mentiría si dijera que no he pensado en tí ni un solo momento... pero eso sería mentir... y ya sabes que yo no se mentir. A veces me pregunto la imagen que daremos desde fuera... yo desde dentro te veo como un angel que ha llegado desde el infierno para cuidarme... y me preguntas si te doy miedo... y es verdad; no es que me des miedo... es que me das pánico. No se ni de la historia la mitad... pero eso ya me da igual. Cuando me abrazas por las noches, cuando me tapas con la manta, cuando me coges en brazos y me dices que todo pasará pronto y después me susurras un "sabes que te quiero mucho" no puedo evitar decirme ¡qué demonios! mi alma ya está condenada, qué mas da que me condenes tu también. Y tienes paciencia, y me explicas las cosas como la niña que para ti soy. Tu dices que eres un viejo... pero cuando duermes yo creo que no es asi... tu eres mi niño, al cual yo también voy a cuidar, porque esto del amor dicen que es cosa de dos... y yo no lo he comprendido hasta ahora ¡mira si seré idiota!
Y aunque se, que al igual que los dulces de chocolate (uno de mis favoritos) tiene fecha de caducidad natural, no puedo evitar sentirme afortunada por tener a alguien como tu estrechándome entre sus brazos...
Y ya ves, que junto con el perro vos y yo hacemos linda estampa!
Y aunque se, que al igual que los dulces de chocolate (uno de mis favoritos) tiene fecha de caducidad natural, no puedo evitar sentirme afortunada por tener a alguien como tu estrechándome entre sus brazos...
Y ya ves, que junto con el perro vos y yo hacemos linda estampa!
viernes, 22 de mayo de 2009
No me importa...
No me importa que hiciste o a donde fuiste. No me importa nada. No me importa si hiciste daño, si te persiguió la policía o si tienes cuentas pendientes con la mafia. No me importa si estuviste a punto de casarte, si tienes la casa, el coche y el local para montar tu vida lejos de aquí. No me importa quién te besó antes que yo, no me importaa quien engañaste o qué cosas ilegales pasaron por tus manos.
Mira bien lo que te digo que todo eso me da igual. Porque tu estás aquí y ahora, y estás conmigo. Y dices que me quieres y yo he decidido creerte.
Por eso me da igual todo el maldito pasado. Porque el mio ha desaparecido en el momento que llegaste tu.
Mira bien lo que te digo que todo eso me da igual. Porque tu estás aquí y ahora, y estás conmigo. Y dices que me quieres y yo he decidido creerte.
Por eso me da igual todo el maldito pasado. Porque el mio ha desaparecido en el momento que llegaste tu.
martes, 19 de mayo de 2009
En mis entrañas...
Me miro al espejo y te acaricio, aunque todavía no sepas de tu existencia. Te hablo y te susurro pequeñas palabras de cariño aunque todavía no sepa si existirás o no. Me pongo los pantalones más bajos que de costumbre, no vaya a ser que te ahogues como me ahogo en ocasiones yo.
Y me imagino que cara pondrías si supieras que no me pareces un problema más que una solución. Quizás seas el angel que va a venir a cuidarme, a salvarme del abismo de mi soledad. Y te cantaré nanas, de esas en las que el malo siempre huye para dejar espacio a la felicidad...
Duerme mi niño... duerme conmigo...
Y me imagino que cara pondrías si supieras que no me pareces un problema más que una solución. Quizás seas el angel que va a venir a cuidarme, a salvarme del abismo de mi soledad. Y te cantaré nanas, de esas en las que el malo siempre huye para dejar espacio a la felicidad...
Duerme mi niño... duerme conmigo...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)